domingo, 19 de agosto de 2018

A mi fiel compañera ausente



Eres quien más tiempo ha pasado a mí lado, quién me acompaña en los momentos de alegría y de tristeza.
He pasado largas noches junto a ti, algunas veces hablando y reflexionando sobre la vida y otras veces, los dos hemos estado en completo silencio, un silencio que se vuelve incómodo, pues no sé si tal vez quieres decirme algo, o simplemente ya no estás conmigo y aún no me he dado cuenta, quisiera poder entenderte y que seas mi guía, pero a veces por tu misma culpa, he llegado a tener momentos de total amargura y tristeza.
No sé si es bueno, no sé si es malo, puede ser perjudicial para mi vida tratar de retenerte y llevarte la corriente, pero ya varias veces te dejé ir y luego dejé de salir a buscarte, para poder encontrarte.

Por tí, he caminado frente al abismo, estando incluso a punto de caer, cuando estás conmigo, al principio se siente bien, pues a tu lado todo es paz y tranquilidad. Pero llega un momento en que te vuelves una carga, un martirio y hasta dolor he llegado a sentir. Es ahí cuando me alejo, cuando empiezo a buscar la compañía de otras personas y mi círculo social crece, pues estando contigo, siempre me alejo de los amigos. Pero pasan los días y ya me haces falta, el no tenerte me hace daño, pero me dañas cuando te tengo y cuando no estás te extraño.
No sé si yo te busco o si tú me encuentras, al final terminamos cruzando la misma puerta y no encontramos juntos en el mismo lugar.

Sé que algún día tendrás que irte y no te veré regresar, yo tampoco saldré a buscarte ni me quedaré esperando, porque seguramente hay alguien más que te necesita y yo habré encontrado lo que necesitaba. Aunque existe la posibilidad de volvernos a ver en el futuro y pueda que yo te rechace o tal vez no te reconozca. Pero me podrías obligar a que me quede, aunque esta vez sería totalmente diferente, pues después de conocerte bien y de todo lo que me has hecho -¿Qué más podrías hacerme?
Así que hoy te deseo suerte, puede que te busque pronto, o esta sea la última vez que me aleje, no sé, si mi destino es contigo o si mi destino es perderte. Yo de aquí jamás me iré, aunque de tu lado me vaya, solo te puedo decir, que lo nuestro aquí se acaba.

PD. Justo cuando te escribía esta carta, tú estabas conmigo, pero por tu silencio no me di cuenta y ya había tomado la decisión de que no hacías parte de mi vida.

By: Yackley
De amor y otras confusiones. 

viernes, 10 de agosto de 2018

Imaginando un sueño

En mi mente he creado un mundo tan inmenso

donde viviremos una vida, sin final y sin comienzo

donde el día corre lento y las noches nunca amanecen

y se alimenta el amor con dos almas que no envejecen

despertar todos los días con el canto de las aves

vivir una fantasía, pero alejados del hades

soy un simple soñador, conquistar el mundo desearía

pero cuando te conquiste acabará mi travesía

por las noches yo te sueño y por el día te pienso

y si te sueño por el día, por las noches ya no duermo

tu eres mi confusión, también mi mayor certeza

todavía no sé quién eres, pero estas en mi cabeza

aquí te sigo esperando, llegaras a mi algún día

puede ser en poco tiempo, aun no lo sé todavía

estaré aquí pensando en ti, o tal vez imaginándote

aunque no seas real, aquí seguiré esperándote

creo que lo hago por instinto o por pura decisión

porque siento que te tengo, pero tengo una ilusión

veo el mundo con otros ojos desde que estas en mi mente

pero cuando este a tu lado veré un mundo diferente

así que no te preocupes, tomate el tiempo que quieras

recuerda que imaginé un mundo donde nadie envejeciera

yo te escribo mientras llegas, escribiré si te vas

solo dejaré de escribir, el día que no ame más

pero mi amor es eterno y aun después de que muera

buscaría a quien amar, aunque la misma muerte fuera

y si me muero de amor, entonces moriré soñando

pero aunque estuviese muerto, aun te seguiré amando.




By: Yackley.


Desde El Fondo




Hoy les hablaré desde el fondo. Y no precisamente desde el fondo de mi alma, corazón, espíritu o ese ser interior en el que cada quien confía. Les hablaré más bien desde lo más profundo​ a donde un ser humano haya podido llegar a sentir.
Y es que prefiero hablar desde la experiencia que se está viviendo y no de la experiencia vivida, pues el pasado más que una historia, puede ser tomado como un mito o una leyenda, así es, tiene muy poca credibilidad. A mí parecer, creo que tiene más valor una historia si cuando se cuenta se enseñan las heridas en lugar de las cicatrices.
Entonces en esta ocasión hablaré de lo que me duele, pero que no me afecta y ustedes se preguntarán, ¿Cómo es eso posible?
Pues sí, me duele, me duele ver la cantidad de injusticias que están sucediendo en la sociedad actual, tal vez no me afectan en este momento, pero me afectaron directamente en el pasado.
Me gustaría hablar de eso y no vengo a buscar culpables ni mucho menos a generar odio o lastima, pues en mi opinión, somos más culpables los que callamos ante la vista de una injusticia, que los mismos que la generan. Siempre he creído que es nuestro silencio el que está dejando morir a los niños de hambre, que los ancianos sean abandonados y olvidados mientras nos ahogamos en una sociedad consumista, que lo único que ha hecho es llevarnos a una vida de apariencias en donde vivimos engañados, muchos hemos estado o aún estamos sumidos en la mentira de vida que tenemos.
Pudiendo ser lo que siempre hemos soñado, vivimos codiciando los triunfos de las demás personas, que supuestamente son exitosas, pero que probablemente anhelan tener la vida que nosotros llevamos.


Para mí, el mayor éxito de una persona, no es cuando se convierte en millonario o cuando logra fama mundial, creo que el mayor éxito de una persona es cuando logra cumplir sus sueños, eso que siempre quiso desde pequeño y que trabajó por conseguirlo cuando se hizo grande. Ese mismo sueño que muchos abandonaron, tal vez por falta de oportunidades, porque no tuvierón a una persona que los motivara para luchar por ello o simplemente la persona que los apoyaba le dijo que lo mejor era estudiar una carrera, tener un trabajo estable y asegurar una pensión. Para algunos, ese método puede funcionar, pero para la persona que soñó algo diferente en su vida simplemente, su éxito podría ser la mayor frustración.
Entonces, vivimos en un país en donde no es difícil lograr hacer realidad nuestros sueños.
El problema ha sido para las personas de escasos recursos, especialmente para los niños, niños que viven en sitios en donde su único sueño es poder salir un día de aquel lugar donde nacieron, poder tener una vivienda digna, incluso poder estudiar, y yo me pregunto - ¿Cómo es posible que un niño sueñe con esto? Cuando debería ser un derecho. Para algunos es posible, para la mayoría fue, es y seguirá siendo un sueño. Pero el cambio empieza por nosotros, cuando nos empiece a preocupar la situación de los demás, no preguntes que se está haciendo para cambiar esto, pregúntate más bien qué estoy haciendo o que puedo hacer para empezar a mejorarlo.
No culpes a los dirigentes de este país, si cada cuatro años votamos por los mismos, no culpes a los ricos, si lo único que te la pasas diciendo es: “cuando yo tenga dinero” y estoy casi seguro que la mayoría de personas que lo tienen no les preocupa este tipo de problemas.

Así que… qué tal si reflexionas un poco sobre esto, qué tal si desde hoy empezamos a hacer la diferencia y qué tal si mañana logramos un cambio.
No se vive mejor cuando se tiene una casa, un carro, un trabajo y cada una de las comodidades que te ofrece la vida. Se vive mejor cuando tienes una causa y luchas por ella, cuando entiendes que hay mas personas en este mundo que necesitan de ti y que le podrías brindar tu ayuda a muchas de ellas.
Así que decide si eres de los que tienen mucho y ayudan poco o si eres de los que tienen poco y dan lo mejor de sí. Y si tienes mucho y ayudas mucho, pues que bueno, eres de las personas que este mundo necesita.

Te recomiendo que busques una causa y lucha por ella, descubre tu sueño y si ya lo tienes pues trabaja cada día más duro para lograrlo y no vivamos como nos dicta la sociedad, vivamos como nos dicte el corazón.

Recuerda, si quieres que tu entorno cambie, entonces empieza por ti.



By: Yackley




viernes, 3 de agosto de 2018

Levantarse



Me levanté de mi cama, seis de la mañana, llovía levemente y no tenía algo planeado para ese día, así que después de tomar un poco de café, me senté sobre una vieja silla artesanal y me quedé mirando hacia la nada. Observaba cómo la lluvia caía sobre el césped en el patio de mi casa, me quedé tan concentrado en ella, que sentía que era capaz de contar las gotas que caían por minuto.

Luego, volví a ser yo mismo, pero ya no era igual. Por mi cabeza empezaron a pasar miles de pensamientos, del pasado, del presente y del futuro. Estoy seguro que fueron más pensamientos en menos de un minuto, que las gotas de lluvia que creí haber contado.
Fue confuso, pues no podía darme cuenta, si había encontrado la forma de utilizar toda mi capacidad cerebral para pensar, o simplemente fue un sueño. Pero dicen que nuestros sueños, son el reflejo de lo que somos o queremos ser.
Me sentí  como un péndulo, porque tenía el corazón en el pasado, mi cabeza en el futuro, pero lo pies bien puestos sobre la tierra en el presente y llevaba mucho tiempo en la misma situación. Tenía claro que mi pasado no era del todo bueno y que mi presente se estaba poniendo peor, así que, de seguir por ese mismo camino, posiblemente iba tener un futuro no tan prometedor y terminaría viviendo en el pasado.

Me levanté de la vieja y desgastada silla artesanal. Me levanté decidido a buscarle un nuevo rumbo a mi vida, quería salir, explorar el mundo, luchar por los sueños que siempre tuve, pero que en esa etapa de mi vida, los había dejado olvidados y hasta pensaba que lo que yo quería era imposible de realizar. Pero estar solo me abrió la mente, ya quería salir y devorarme el mundo en un minuto.

Y así sucedió, a partir de ese día dejé todo atrás, decidí que el pasado sólo sería mi maestro, que el futuro iba ser mi ilusión, pero el presente sería mi fiel compañero. Lo que nunca imaginé, es que ese presente no llegaría solo, que vendría acompañado de éxitos, fracasos, amoríos, tristezas, alegrías y sobre todo soledad. Momentos que han hecho parte de mi vida y me han convertido en lo que soy y lo que seré en el futuro...

Esto es solo un resumen. Pero si decidiera contar mi historia desde el principio hasta final, o por lo menos hasta hoy, y si ustedes la quisieran leer deberían esperar y comparar mi libro(porque espero que ojalá me quede mucha vida por delante) pues seguiré escribiendo mi historia, literal y metafóricamente.

...Solo quiero decir, que desde ese entonces, mis sueños no han muerto, tal vez, me ha bajado la moral o he llegado incluso a querer abandonarlos, pero recuerdo que por ellos fue que dejé todo atrás e hice la promesa de jamás volver y me levanto cada día con más ganas de seguir luchando hasta lograr mi objetivo.

Decidí contar mi historia, no para que sepan sobre mí, sino para que se pregunten, ¿qué están haciendo por sus sueños? O si por lo menos ya tienen claro, cuáles son sus metas y si están planeando empezar a trabajar para conseguirlas.

Yo mientras tanto seguiré soñando y espero algún día poder decirles -Lo he logrado. Y también escucharlos decir que lo alcanzaron.

By: Yackley
Aquella travesía (resumen)