sábado, 10 de noviembre de 2018

Lo Siento


¡LO SIENTO!
Porque tal vez cause decepciones o, quien sabe, también podría causar alegrías. Son las consecuencias de tomar decisiones, a veces nos equivocamos y otras veces acertamos, pero lo importante de esto es, siempre hacerlo consciente-mente. Nos dicen que no debemos tomar decisiones a la ligera, pero hay momentos en que las circunstancias de la vida no nos dan tiempo y aunque es cierto que jamás vamos a estar preparados para algo, por lo menos podemos intentarlo y saber que más importante que estar preparados, es estar dispuestos.
Me he encontrado en situaciones en las que tengo que decidir y me ha costado trabajo saber que camino debo tomar y cual abandonar, es realmente difícil tomar una decisión, como bien sabemos, cuando estamos acostumbrados a algo, se nos hace muy duro abandonarlo y dejar todo atrás, pero también sabemos que, si seguimos adelante, lo estamos arriesgando todo, que tenemos la posibilidad de perder y ganar en cada una de las decisiones que tomemos. Lo que debemos de tener claro a la hora de decidir, es que después no vale de nada el arrepentimiento, que cuando nos equivoquemos, solo debemos tomarlo como una lección, sacarle provecho a eso que hayamos aprendido, y comenzar una nueva ruta o un nuevo proyecto.
Muchas veces, cuando tenemos que tomar una decisión, dentro de nosotros surge un conflicto entre el sentimiento y la razón, entre lo que queremos y lo que debemos, es ahí en donde tenemos que buscar en lo mas profundo de nuestro ser, dejar que sea el alma quien nos guíe, casi siempre tiene las respuestas correctas y todo el tiempo han estado dentro de nosotros mismos.
Claro que también me he equivocado y me he arrepentido por las decisiones que tomé luego de seguir lo que decía mi corazón, pero fueron mas veces la que me sentí feliz y agradecido, veces en las que me miré al espejo y dije, ahí estas, eres el ganador, lograste lo que te habías propuesto, pero así es la vida y así debe ser, anduve por muchos caminos de los cuales debí haberme desviado, pero me ayudaron a crecer. Después de todo, no fue tal malo como pensaba, es más, me di cuenta que todos aquellos errores y aciertos que había tenido a lo largo de mi travesía llamada vida, me habían enseñado a que debemos decidir sin miedo.
¿Y qué más da?, si tomamos una decisión conectados con el alma y nos hace sentir bien, nos deja una lección, nos da paz interior y sobre todo nos hace felices, esa decisión siempre será la correcta.
Teniendo en cuenta que todo lo que pasa, pasa con un propósito, espero que, como yo, decidan tomar un camino, atravesarlos e incluso desviarse hacia otro, pero siempre recordando seguir adelante, escuchando esa vos interior que siempre nos llevará por el camino correcto, el camino hacia el cumplimiento de nuestro propósito.
By: Yackley
Recuerda: “si quieres complacer a los de más, al único que estas rechazando es a ti mismo” DH.